Cuando llega la noche,
y la oscuridad envuelve su
alma.
Cuando los sueños afloran
perdido entre sabanas,
sumergido entre olivares
altivos,
repletos de frutos, llenos de
recuerdos.
Cuando el hombre suspira.
Cuando mira una vida, sin sentido,
desprendida de él
con el corazón partido.
Cuando sin la palabras se
siente dormido,
lleno de perjuicios, vida sin
destino,
corazón suplido por hordas de
nada.
Recurre a la llama. Al viejo
candil
para seguir vivo. Su llama le
incita.
Su llama le atrapa, se siente
seguro.
Ella es su esperanza.
Cuando las lagrimas afloran a
sus ojos
calmándole el alma.
No hay nada perdido.
Aun esta el camino de cañas y
zarzas.
Lleno de heridas por andar
sin capa.
Solo a campo abierto.
Queda la esperanza.
Otra vez la palabra.
antonio molina
Cuando las miradas hablan y acarician,
ResponderEliminarcuando el día se hace noche,
cuando las lágrimas se transforman en sonrisas
cuando el silencio se hace palabra.
Antonio, me encanta tu manera de transmitir, y siempre me inspiran tus letras.
Un beso.
Gracias María,nos motivamos mutuamente. Esa es la grandeza de la Poesía, cuan do esta enrreada en el corazón ente sentimientos.
ResponderEliminarUn beso
Antonio